Lo peor del 2016 (HATE, HATE, HATE)

2016 no fue el mejor año en cuanto a lecturas nos referimos. Puede que sea mi culpa, por enfocarme demasiado en leer una misma temática y no expandirme a otro tipo de historias, o simplemente por el hecho de que no me sentía con los ánimos adecuados para leer. Who knows?

En general, me topé con libros malos e irrelevantes a lo largo de estos últimos doce meses, y aunque hay excepciones, puedo contarlas con los dedos de una sola mano.

Creo que es innecesario colocar un disclaimer, pero de todas maneras allí va: sí alguno de tus libros favoritos está en esta lista, no significa que sea necesariamente malo. Es mi opinión, mi percepción de la historia, la cual no define el valor que tiene el libro para ti.

7) Tal vez Mañana (reseña): Lo digo y siempre lo diré; la temática New Adult no es para mi. El 99% de los libros que están encasillados en esto y he leído me lo confirmaron.
Tal vez Mañana contiene los típicos componentes de una novela NA: un personaje masculino con un background de miedo, una chica pueblerina que no mata ni a una mosca y, lo peor de todo, la justificación del cheating. Agréguenle una dosis de sexismo y BOOM, tienes Tal Vez Mañana.

El libro cuenta con kilos y más kilos de drama injustificado. Y no estoy exagerando, esto consumió, por lo menos, cien páginas de la novela, cien páginas te quiero pero no, de lo que estoy haciendo está mal pero no voy a corregirme.

6) Un Corazón de Piedra: ¿Se acuerdan de esos niños en la primaria, aquellos que hacían cosas malas (desde la perspectiva de un niño, claro) y, según ellos, eran de lo mejor? Pues el protagonista y narrador de este libro es la viva imagen adolescente de ello.
La historia está llena de clichés y trópicos aburridos. La caracterización de los personajes es algo acerca de lo que la autora nunca ha escuchado.
Un punto que quiero resaltar, y que fue la gota que rebalso el vaso, es el hecho de que el protagonista era distribuidor de drogas en su escuela. Le entregaba drogas a chicos de 15/16 años. Y te lo presentan como algo genial. Just, no.

5) The Heir (reseña): Nunca he sido una gran partidaria de Kiera Cass, pero, en definitiva, con The Heir asesinó las pocas esperanzas que le tenía.
Si America es una protagonista que resulta fastidiosa para algunos, Eadlyn la supera y con creces.
Los aspectos políticos y sociales que son el trasfondo de la historia fueron tratados de manera muy superficial, además de ser resueltos de una manera muy irreal. No creo (y espero) que un país pueda ser regido de esa manera.

4) Never Never: Part Three: La historia de Never Never cuenta con un argumento excelente, y aunque la primera y segunda parte no lo expusieron tan bien, dejaron mis esperanzas puestas en este último tomo.
La resolución del problema principal fue una de las cosas más ridículas que me ha tocado leer.
Esperaba algo grande, una explicación que le hiciera justicia a todo el misterio creado en las primeras partes, pero lo que las autoras nos otorgaron fue sentimentalismo barato.

3) The Summer I Turned Pretty (reseña): A pesar de que estoy completamente enamorada de los otros libros de esta misma autora, The Summer I Turned Pretty me resultó una novela insulsa y problemática.
Aquí tenemos el típico trópico juvenil: una protagonista muy dulce e inocente, que tiene un crush enorme por este personaje que no le hace caso y, es más, la trata como basura.
El entorno que rodea la historia es machista, son incontables las veces en que se dudaba del valor de la protagonista por el hecho de ser mujer, y ella estaba de acuerdo, porque era el trato que se le había administrado desde pequeña.

2) Starters: Queen of clichés. Instalove en estado puro. Historia mal desarrollada y personajes extremadamente planos.
El concepto fue lo que me introdujo al libro, y pienso que, en las manos correctas, esta podría haber sido una novela de sci-fi excelente, pero el libro se enfoca demasiado en el romance trashy adolescente y deja de lado un trasfondo social muy interesante.

1) Besos Entre Líneas (reseña): Este libro representa a la perfección todo lo que odio. Está el típico estereotipo de chica lectora, el guaperas de turno que te trata mal y te pone droga en el bolso (ay, pero tu lo dejas porque, ¿ya dije que es guapo?), mensajes escritos mediante técnicas criptológicas y una buena dosis de drama innecesario.
La protagonista está para que tu te compadezcas de ella; tiene un pasado trágico y difícil y sus días giran en torno a aquella tragedia que la marco de pequeña. Una Mary Sue en todas sus reglas.

En fin, sé que esta entrada destila odio a raudales, pero créanme, era necesario hacer esta catarsis. Todas estas son historias que en un principio tal vez me llamaron la atención, pero que no supieron desarrollarse de la manera adecuada y terminaron quedándose entre mis peores recuerdos del 2016.